En el mes de junio el grupo de distribución Bon Preu llegó a un acuerdo con la multinacional francesa Intermarché para la compra de su red española de supermercados, formada por 53 establecimientos, pero a pesar de que siguen las conversaciones, Bon Preu no parece estar interesado en las bases logísticas que Intermarché tiene desde 1999 en Santa Oliva, con 250 trabajadores, y en Almansa (Albacete) con unos 50.
Al parecer la multinacional francesa habría iniciado contactos para la venta de esas instalaciones intentando salvar el máximo de puestos de trabajo. Aunque no sean para actividad logística de alimentación, Intermarché quiere aprovechar la modernidad de la instalación de Santa Oliva y también la estratégica ubicación –en un cruce de autopistas y carreteras en el eje entre Barcelona y Tarragona y Aragón– para encontrar compradores.
Desde Bon Preu se limitan a recordar que hicieron un acuerdo de compra del negocio de Intermarché en España pero que todavía deben cerrarse las concreciones. Además Bon Preu ya cuenta con centros de distribución en Masies de Voltregà y en Tona que le permiten cubrir las necesidades que generen la compra de los supermercados.